La transformación tecnológica de los últimos años ha impacto todos los sectores del quehacer humano, entre ellos al trabajo. Hay un amplio debate de su impacto en la eliminación de empleos por la automatización y ahora, se enciende más con la irrupción de las plataformas de inteligencia artificial (IA).

 

Empiezan a aparecer los primeros estudios del impacto de la IA. OpenAI, la empresa que desarrolló ChatGTP, publicó un documento que señalaba que “alrededor de 80% de la fuerza laboral de los trabajadores de Estados Unidos tendrán al menos 10% de sus tareas afectadas por ChatGPT y tecnologías similares. El 19% de los puestos de trabajo serían afectados directamente” (https://bit.ly/3MreA0X).

 

Por su parte, Goldman Sachs realizó una investigación donde concluye que la IA “podría ocasionar una disrupción en el mercado laboral que afectaría a 300 millones de empleos en todo el mundo. El avance podría conducir a la automatización de una cuarta parte del trabajo realizado en Estados Unidos y Europa, mientras que alrededor de las dos terceras partes de los trabajos actuales están expuestos a un grado de automatización”.

 

Recientemente el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) dio a conocer su Reporte sobre el futuro del empleo 2023, que considera que 23% de los puestos de trabajo sufrirán cambios significativos en los próximos cinco años, considerando el impacto de la IA.

 

Este reporte considera que este impacto será positivo al final del día “pues se espera que la creación de trabajos relacionados con esta área, como macrodatos, computación en la nube, ciberseguridad e inteligencia artificial, compense la destrucción de plazas en otras áreas (https://bit.ly/3LYRrCE).

 

“Se espera que todas las tecnologías, excepto dos, sean creadoras netas de empleo en los próximos cinco años: los robots humanoides y los robots no humanoides”.

 

Los empleos que más crecerán en los siguientes cinco años son especialistas en IA y machine learning (38%), en macrodatos/big data (35%), desarrolladores de aplicaciones (35%) y analistas de inteligencia de negocios (22%).

 

Y los que pueden desaparecer: contadores y auditores (-43%), personal de contabilidad, teneduría de libros y nómina (-34%), capturistas de datos (-27%), gerentes de administración y servicios empresariales (-21%), trabajadores de fábrica y ensamblaje (-15%), y abogados (-11%).

 

Otro dato relevante de este reporte es el hecho de tendremos que aprender nuevas competencias, pues se piensa que 44% cambiarán. Las nuevas habilidades tendrán que ver con el pensamiento analítico (54%), pensamiento creativo (49%), inteligencia artificial y macrodatos (48%), resiliencia, flexibilidad y agilidad (42%), y liderazgo e influencia social (32%).

Un dato importante es que para México se espera que dos de cada cinco trabajadores necesitarán capacitación para desarrollar estas nuevas habilidades.

 

Frente a los cambios tecnológicos, no hay opción y menos esperar. Es importante que entendamos que el futuro ya está aquí y que necesitamos empezar a reaprender nuevas competencias y habilidades. En ello esta comprometida nuestra empleabilidad. No hacerlo con tiempo puede alejarnos de los cambios con oportunidades que ya están en proceso.