La explosión del mundo digital se dio a partir de la oportunidad de conectar a las personas y las máquinas. Internet y las telecomunicaciones abrieron una ventana de inimaginables, infinitas y sorprendentes oportunidades. Un fenómeno que nació en los años 90 ha cambiado la historia de la humanidad y así seguirá.

En la actualidad hay cerca de 4,400 millones de personas conectadas a Internet, esto es, 57% del total de la población mundial. Y la penetración de la conectividad a la red de redes avanza a pasos agigantados. Solamente el año pasado, se sumaron 390 millones de nuevos internautas.141_INFOGRAFIA_CONECTADO

Pero no sólo se está conectando a las personas. A cada momento se entrelazan a más máquinas o dispositivos. Peter Diamandis, de la Universidad de la Singularidad, asegura que el próximo año “habrá más de 20 mil millones de dispositivos conectados y más de un billón de sensores. Para 2030, esas proyecciones subirán a 500 mil millones y 100 billones”.

¿Cómo podremos conectar a todos y a todo? Para ello ya existen varias iniciativas para incrementar la cobertura de Internet, el ancho de banda y velocidad de la red digital. Entre las principales iniciativas destacan:

  • Space X de Elon Musk. Este proyecto, basado en la tecnología Starlink, busca incrementar la conectividad en el mundo a través del uso de pequeños satélites colocados en órbita baja para reducir los tiempos de retraso. Estos dispositivos, por estar más cerca de la Tierra, cubren menores territorios, lo que demanda un mayor número de este tipo de artefactos. Actualmente se ha solicitado a la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos la autorización para lanzar los primeros 4,425 pequeños satélites de órbita baja, que se localizarán a 1,100 y 1,324 kilómetros de distancia de la Tierra. Con solo 800 de este tipo de máquinas se podría ofrecer acceso de banda ancha en Estados Unidos y a nivel internacional. Space X calcula tener una constelación de 7,518 satélites a una órbita de 340 kilómetros para ofrecer Internet de alta velocidad en todo el mundo a precios muy competitivos.
  • OneWeb de Boeing. Esta empresa aeronáutica piensa lanzar 2,956 pequeños satélites de órbita baja para dar servicio en Estados Unidos y en el mundo a usuarios de gobierno y empresas.
  • Proyecto Loon de Google. La empresa líder en información en el mundo busca darle opciones de acceso a Internet a quienes habitan en zonas remotas de la Tierra a través de globos lanzados a la estratósfera (a 18 kilómetros de la superficie terrestre). Estos globos se conectarán a redes de telecomunicaciones para potenciar la señal a las zonas remotas y marginadas. Funcionan con energía solar.

Se piensa que la próxima década habrás más de 12,000 nuevos satélites de órbita baja para ofrecer cobertura total de conectividad en el mundo y también con ello la posibilidad de enlazar a todos los dispositivos existentes, en una versión potenciada del Internet de las Cosas. Con ello, podremos a llegar a niveles difíciles de imaginar debido a la conexión de miles de millones de mentes dispuestas a compartir su conocimiento, crear e innovar nuevos productos y servicios, y expandir los mercados de manera exponencial.

Todos conectados y todo conectado nos acercará a un mundo donde todo podrá ser automatizado y potenciado. Un nuevo estadío de desarrollo que cambiará de nuevo la historia de la humanidad. Cambiarán de nuevo el funcionamiento de nuestras vidas, hogares, ciudades, empresas, gobiernos y la sociedad en su conjunto.

Estamos abriendo una nueva etapa de la historia del hombre a partir de la potenciación de la conectividad total. ¿Estamos preparados para ello? ¿Cómo podremos estarlo? Son preguntas que deberían de estar en el centro de la agenda de las personas, las empresas, los gobiernos y de la sociedad en general. De ello dependerá nuestro espacio en una nueva economía totalmente conectada y potenciada por el intercambio exponencial del conocimiento.