Dormir nos permite descansar el cuerpo y la mente. Una tercera parte de nuestra vida la dedicamos a dormir y es la base para una buena salud, nuestro desempeño personal y profesional, y calidad de vida. Es un tema fundamental para la adquisición de conocimientos y enfrentar una vida llena de retos y de estrés.
A la ciencia del sueño se le han dedicado recursos crecientes para investigaciones que han dado pie a la creación de métodos, técnicas y rutinas para mejorar la calidad de nuestras horas de descanso.
En contraparte, en un mundo competitivo se ha estigmatizado el descanso y se promueve la adicción al trabajo como fuente de ventaja profesional. Ello está creando problemas crecientes entre las personas, pues la falta de sueño y de calidad del mismo provoca trastornos físicos y mentales desde la productividad profesional, pasando por enfermedades mentales hasta la propensión a la obesidad y la diabetes.
Las últimas investigaciones sobre el sueño están cambiando paradigmas de muchos años, y nos acercan a nuevas formas de mejorar nuestro descanso, usando la tecnología para ello. De cierto es que los tecnólogos se han obsesionado con el tema y están enfocados en buscar ¨hackear¨ el sueño humano, esto es, alterar el sistema humano de nuestros ciclos de sueño para mejorarlo a través de diferentes impulsos manejados por sistemas basados en la tecnología.
Para entender el proceso de hackeo del sueño humano es importante conocer un nuevo hallazgo en la ciencia del sueño: la existencia de los cronotipos. Así, el cronotipo es ¨la sincronización de los ritmos circadianos, un ciclo fisiológico subyacente de 24 horas que se produce en la mayoría de los organismos vivos¨.
A partir de conocer los ciclos de la generación de la producción natural de melatonina, la hormona del sueño, los cronotipos sirven para saber en qué parte del día estamos más despiertos y cuál es el mejor momento para descansar. Hay tres cronotipos identificados:
- Cronotipo matutino. Son personas que se duermen al anochecer, pero que están activas muy temparano en la mañana. Duermen entre las 10 de la noche y las 6 de la mañana.
- Cronotipo vespertino. Son las personas que trabajan mejor de noche, pero duermen más de día. Duermen entre las tres y las 11 de la mañana.
- Cronotipo intermedio. Son la mayoría de las personas. Duermen entre las 12 de la noche y ocho de la mañana.
Conocer el cronotipo de las personas permite identificar cuáles son los horarios de mayor productividad para el trabajo y el descanso. Estos nuevos conocimientos rompen con el paradigma de que todos los humanos debemos de tener horarios similares y dejan en claro que dependiendo del cronotipo es la cantidad de horas de sueño requeridas.
Para ayudar a aplicar estos nuevos conocimientos el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) desarrolla una aplicación denominada Dormio. Esta es una especie de guante que identifica señales del ciclo del sueño como el tono muscular, el ritmo cardíaco o la conductividad de la piel para hackear el sueño a través del uso de un celular inteligente con audios (sonidos y palabras) diseñados para este propósito.
Pronto veremos en el mercado diferentes opciones tecnológicas para mejorar nuestro sueño a través del hackeo inteligente del sistema biológico humano. Con ello vamos a poder incrementar nuestra capacidad cognitiva y evitar enfermedades y trastornos de diferente tipo que limitan nuestra calidad de vida. La tecnología seguirá sorprendiendo hasta en nuestros sueños por lo visto.