Contexto
- Recientemente la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) dio a conocer el documento La nueva Revolución Digital. Los datos que refiere del tamaño del mercado digital son impresionantes, mismos que toma de la Unión International de Telecomunicaciones (UIT). En 2015, ya tenemos en el mundo 3,600 millones de suscriptores de telefonía móvil, 2,923 millones de usuarios de Internet, 3,000 millones de suscriptores de banda ancha y 60,000 exabytes mensuales de tráfico por Internet.
- La obra de referencia asegura que los bienes y servicios, activos financieros, información y comunicación se han incrementado significativamente en los últimos años como resultado del crecimiento económico y del uso masivo de las tecnologías digitales e Internet.
- Como ejemplo del impacto de la revolución digital, menciona lo sucedido en áreas como la información y la comunicación, el entretenimiento, el comercio, la educación, la salud y el gobierno. Pero también resalta el papel de las nuevas tecnologías en la globalización y facilitación del comercio mundial.
La nueva revolución digital
- Las estadísticas que aporta la CEPAL del uso de Internet en el mundo este año dan cuenta de su papel central, principalmente como un medio social, pero con un uso creciente en la economía y la política. Aquí algunas números de lo que sucede en el mundo social:
- 1,708 llamadas por segundo por Skype
- 655 horas de video por segundo en Netflix
- 800 aplicaciones descargadas por segundo desde App Store
- 1,843 publicaciones por segundo en Tumblr
- 964 aplicaciones descargadas por segundo de Android
- 1,923 fotos por segundo en Instagram
- 2,361 dólares en ventas por segundo en Amazon
- 8,893 tuiteos por segundo en Twitter
- 1,000 millones de archivos cargados por día
- 44,445 búsquedas por segundo en Google
- 4,500 millones de publicaciones diarias en Facebook
- 98,467 videos vistos por segundo en YouTube
- 27,000 millones de mensajes diarios por WhatsApp
- 2´383,625 correos electrónicos compartidos al día
- A estos grandes impactos, hoy se le suma a las nuevas tecnologías su impacto en la economía. La CEPAL asegura que la digitalización está teniendo grandes efectos en la producción de bienes y servicios al reducir los costos de transacción y los costos marginales de producción y distribución. Este organismo internacional menciona que el impacto económico de lo digital se da en tres vertientes: la creación de bienes y servicios digitales, la agregación de valor al incorporar lo digital en bienes y servicios en principio no digitales, y el desarrollo de plataformas de producción, intercambio y consumo.
- El documento de La nueva Revolución Digital de la CEPAL va más allá y adelanta el futuro para advertir a los gobiernos de la región de tomar medidas a tiempo. Asegura que el comportamiento de la economía mundial deja en claro que estamos en un importante proceso de cambio: estamos pasando del uso de Internet para el consumo hacia un uso futuro centrado en el consumo y la producción. Para respaldar este argumento, la CEPAL enumera diferentes iniciativas que van en esta dirección por parte de los países desarrollados: Industria 4.0 en Alemania, Industrial Internet en los Estados Unidos y Made in China 2025.
- Aún más, la CEPAL encuentra coincidencias en estos casos: incremento de capacidades de producción de hardware, software y plataformas globales; y mejora de su industria manufacturera mediante las tecnologías digitales y la robótica avanzada, buscando con ello el desarrollo de sistemas de producción ciberfísicos.
Conclusiones
- La CEPAL nos está advirtiendo a tiempo de los cambios que ya operan en las grandes economías, que van más allá del uso de Internet para fines de comunicación y consumo. Ahora viene una nueva revolución: el uso de Internet para la producción.
- En México seguimos atrapados en la penetración de Internet, su acceso, sus tarifas y su calidad. Hacemos uso marginal de las nuevas tecnologías en los ámbitos de la educación, la salud y el gobierno. Y poco estamos haciendo para sumar estas capacidades a nuestras empresas e industrias, principalmente de las micro, pequeñas y medianas.
- Otra vez más, nuestro país se enfrenta al gran riesgo de no entender la evolución del mundo, y sumar un rezago más al de la exclusión social de Internet: la exclusión industrial del uso de Internet y la nuevas tecnologías.